En todos los post que desde
Animalia escribimos, continuamente estamos haciendo mención a los conceptos de
líder de la manada y de los seguidores, y aunque en un post anterior ya
empezamos a hablar de lo que significa ser lo uno o lo otro dentro de nuestra
manada o familia, en este post vamos a profundizar y explicar como se comporta
una autentica manada de perros salvajes, para poder comprender mejor la manera
de relacionarnos con nuestra mascota, que al fin y al cabo posee los mismos
instintos naturales que los perros que viven en la naturaleza.
Desde que nace un cachorro, de
manera instintiva reconoce a su madre como el primer líder de su vida, quien le
educa para que se desarrolle como un miembro cooperativo dentro del grupo.
Cuando el cachorro deja de depender de su madre, entra a formar parte de la
estructura del grupo siguiendo las indicaciones del líder de su manada.
En la naturaleza, el líder de una
manada nace, no se hace. Los líderes de las manadas nacen con niveles de
energía altos o muy altos, dominantes y firmes, aunque como en todos los
miembros del grupo, tranquila. En ocasiones vemos a perros macho jóvenes
intentando montar a otros perros macho. Esto no tiene nada que ver con la
sexualidad del individuo, sino más bien con los comportamientos de dominancia o
sumisión que empiezan a desarrollar.
La mayoría de los perros nacen
con una energía media o baja, por lo que han nacido para ser seguidores, ya que
ser líder significa mucho más que ser el primero a la hora de comer. Ser líder
implica una gran responsabilidad, de él depende la supervivencia del grupo,
busca alimentos, agua, donde guarecerse, quien come, cuanto y cuando, porque
cuanto más fuerte se encuentre el grupo de caza, más alimento tendrá la manada.
Para los seguidores la vida es más sencilla, menos estresante, ya que es más
fácil vivir dentro de unas reglas fijadas por el líder.
Por lo tanto, cuando vayamos a
adoptar un cachorro o un perro adulto, debemos asegurarnos del nivel de energía
y de dominancia que muestra el perro, ya que si se trata de un nivel de energía
alto y una fuerte dominancia, deberemos ser capaces, como individuo de la
manada de estar por encima de estas expectativas, es decir mostrar un nivel de
energía elevado y un gran poder dominante, porque para un perro, la pertenencia
a un grupo se superpone al instinto de desarrollar un papel de liderazgo.
Una vez visto la manera de
comportarse y de relacionarse de los perros en su estado natural, ¿como podemos
saber si nuestro perro está actuando como líder o como seguidor?.
El lenguaje corporal de un perro
lo es todo si queremos saber que nos están diciendo. Así, mientras que los
líderes poseen una gran confianza en ellos mismos y por lo tanto lo demuestran abiertamente
y de manera natural con posturas como la cabeza alerta, el pecho elevado, y las
orejas y el rabo levantados, los seguidores muestran una cabeza agachada o en línea
con el cuerpo, con las orejas bajadas, meneando el rabo y siempre detrás del líder,
ante quien se tumbarán o rodaran mostrando su barriga ante cualquier desafío de
este.
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