En las sociedades avanzadas, las
mascotas y en especial los perros están consiguiendo tener un papel importante
en la vida de las personas y de las familias. Como un individuo más de la
familia, pensamos que el darle todos los caprichos a nuestra mascota y dejar
que haga lo que quiera en cada momento va a suponer que esta pueda vivir una
vida mucho más feliz junto a nosotros.
Lo cierto es que esto no es así, sino
que contrariamente puede generar en nuestra mascota cierto desequilibrio y
puede suponer la causa de malos comportamientos y en casos más extremos,
agresividad. ¿pero entonces, a que se debe este desequilibrio?
De manera natural, los perros
están acostumbrados a vivir en manada. La manera de organización de estas es
muy simple, hay un miembro alfa, al que se considera el líder de la manada con
la energía y la experiencia suficiente para tomar las decisiones correctas para
todo el grupo, y el resto de individuos que se dedican a seguir al líder.
Para tu perro, su manada es tu
familia y por lo tanto debes adoptar el papel de líder de esa manada. Ser el
líder conlleva una gran responsabilidad, porque como hemos dicho, es la persona
que debe saber tomar las decisiones correctas. A lo largo del día y casi sin
darnos cuenta, tomamos cientos de decisiones con la intención de hacer las
cosas de la mejor manera posible, aunque a veces podamos equivocarnos.
Con
nuestra mascota el objetivo es el mismo, debemos ser capaces de tomar nosotros
las decisiones y nuestro perro, como individuo seguidor de nuestra manada,
aceptarlas de una manera natural e instintiva.
Ser el líder de tu familia no es
un trabajo sencillo, sino que requiere de mucho esfuerzo y dedicación, pero
esperamos con este blog facilitarte la faena.
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